

Es un extensor USB que permite extender una conexión USB hasta 150 metros utilizando un cable CAT6. Sirve para conectar un dispositivo USB a una distancia considerable de la computadora o fuente de señal. Beneficios: expande un puerto USB de entrada a hasta 4 puertos USB de salida, es compatible con Windows, MAC, y Linux, y facilita el uso de periféricos en ubicaciones alejadas, como impresoras, cámaras, y teclados. Ideal para entornos donde se requiere flexibilidad en la ubicación de dispositivos USB.
Descripción ampliada
Permite extender la conexión USB desde un dispositivo principal, como una computadora o un servidor, a dispositivos periféricos que se encuentran lejos, hasta una distancia de 150 metros. Esta extensión se logra utilizando un cable CAT6, que es comúnmente empleado en redes de área local (LAN). Esta capacidad es especialmente útil en entornos donde los periféricos USB deben estar ubicados a distancia del equipo central, como en oficinas grandes, estudios de grabación, instalaciones industriales o sistemas de vigilancia. Esta funcionalidad resulta vital cuando se necesita conectar dispositivos como impresoras, cámaras, teclados, ratones, o dispositivos de almacenamiento a una distancia considerable del punto de origen, sin perder la calidad de la señal USB.
Descripción ampliada
Cuenta con un puerto USB de entrada y puede extender la señal a hasta cuatro puertos USB de salida en el receptor. Esto significa que puedes conectar varios dispositivos USB simultáneamente a través de una única conexión extendida. Por ejemplo, podrías tener un teclado, un ratón, una impresora y una cámara web conectados a través de los puertos extendidos, lo que facilita la gestión de múltiples periféricos desde un solo punto de conexión. Esta característica es ideal en entornos donde se requiere la operación de múltiples dispositivos USB desde una ubicación remota, como en aulas de formación, laboratorios, o centros de control, permitiendo un control centralizado y eficiente.
Descripción ampliada
Es compatible con los sistemas operativos más comunes, como Windows, macOS y Linux. Esta compatibilidad garantiza que el dispositivo funcione sin problemas independientemente del sistema operativo que estés utilizando. No necesitas preocuparte por instalar controladores adicionales o software especial, lo que simplifica la configuración y el uso. Esta versatilidad es especialmente beneficiosa en entornos con diferentes tipos de sistemas operativos, como oficinas que utilizan una mezcla de equipos Windows y Mac, o instalaciones donde se prefieren sistemas operativos de código abierto como Linux.